lunes, 23 de enero de 2017

Reseña de "4 Gods"


¡Khyndrak os muestra "4 Gods"!



--> Tipo de juego: colocación de losetas en tiempo real. Es semejante a montar un puzle entre varias personas jugando todos al mismo tiempo, sin turnos. También hay que colocar profetas para tener el dominio de los diferentes tipos de terreno (llanuras, mares, montañas  y bosques) y así puntuar.  


--> Objetivo: ser el jugador con más puntos al final de la partida. Hay tres formas de puntuar, dos de las cuales dependen del dios que hayáis escogido durante el transcurso de la partida. 

--> Jugadores: desde 2 hasta 4.
--> Tiempo de juego: entre 30 - 45 Minutos (depende del número de jugadores).
--> Edad recomendada: 10 años
-->Editorial: Ludically
-->Autor: Christophe Boelinger
-->Ilustrador: Ismaël






* Lo que necesitáis para construir un mundo

       El tablero de juego lo iréis formando vosotros mismos a medida que juguéis colocando losetas siguiendo unas sencillas reglas. Las losetas se colocan en el interior de un marco de juego, el cual tiene la función de delimitar la zona de juego y que a la vez es el marcador de puntos.







    Cuatro dioses. Sí, el nombre del juego viene a cuento porque en el juego hay cuatro deidades, cada una de las cuales domina uno de los tipos de terreno que hay presentes en él: llanuras, mares, bosques y montañas. Para cada dios hay catorce profetas, muñecos pequeños con los que dominaréis las diferentes regiones por tal de que vuestra influencia sea mayor a la del resto de dioses y así puntuar.






      
       En la bolsa de tela es donde permanecen las 92 losetas de doble cara que hay en el juego. De ella es de donde extraeréis todas, tanto en la preparación como durante el transcurso de la partida.




    
     
        El reloj de arena de 30 segundos se utiliza en la modalidad "Juego por Turnos". En este modo de juego disponéis de treinta segundos en vuestro turno para hacer lo que queráis antes de que se agote el tiempo y paséis el reloj al siguiente jugador en sentido horario.






       Este es el marcador para indicar que la partida se va a jugar con los dioses visibles. Esta modalidad de juego supone el poder elegir el dios que queráis en el momento que deseéis de la partida.
     





      Por otro lado, es posible jugar con la modalidad de dioses secretos. Cada uno de vosotros recibiría al azar una reserva cualquiera de profetas y después un dios boca abajo, también al azar. El dios que tengáis cada uno lo podéis ver vosotros mismos, pero no mostrarlo a los demás hasta el final de la partida. Y es muy probable que el color de los profetas que os haya tocado no coincida con vuestro dios, cosa puramente normal.





     Si jugáis cuatro jugadores tendréis que colocar diez profetas en cada una de las reservas (las cajas de colores). Cada uno de vosotros dispondrá de diez espacios de descarte para eliminar losetas. Los espacios de descarte se encuentran en los bordes del marco de juego.







     Con tres jugadores se colocan trece profetas en cada reserva. Cada uno de vosotros dispondrá de trece espacios de descarte para eliminar losetas. 






     Con dos jugadores pondréis trece profetas en cada reserva. Además tendréis  veinte espacios de descarte para eliminar losetas, ya que el marco de juego se colocará en posición de diamante respecto a vosotros, no de forma cuadrada, que es la habitual.






Esta es la ficha que indica que el juego se va a jugar en tiempo real. 






Esta otra es la que marca que el juego se va a jugar por turnos usando el reloj de arena.





    Y para finalizar, estas fichas son las ciudades legendarias. Por una cara muestran la ciudad legendaria como tal (arriba) y por la otra son ciudades legendarias destruidas (abajo).






* Preparándoos para vuestra mayor obra.

1- Montad el marco de juego uniendo las piezas correspondientes. 





2- Preparad cada reserva de profetas con la cantidad de estos adecuada al número de jugadores que vayáis a jugar: 2 y 3 jugadores = 13, 4 jugadores = 10. Acordaos de que con dos jugadores el marco de juego debe situarse en forma de diamante. 

3- Elegid la modalidad de juego: por turnos usando el reloj de arena o tiempo real. Colocad la ficha correspondiente cerca del tablero para que todo el mundo tenga constancia de ello.

4- Elegid la modalidad de los dioses: visibles o secretos. Colocad la ficha correspondiente cerca del tablero para que todo el mundo tenga constancia de ello. Haced la preparación pertinente de los dioses según la modalidad escogida, según lo explicado anteriormente. 

5- Formad una reserva con las ciudades legendarias. 

6- Cada uno de vosotros debe robar dos losetas de la bolsa. Tenéis que tener una de las losetas en la mano izquierda y la otra en la mano derecha. Esto parece una chorrada pero afecta al desarrollo de la partida. 







* ¡Que empiece vuestra gran obra! Formando el mundo.

      La forma de jugar a 4 Gods es la mar de curiosa. Lo que voy a explicar aquí es aplicable para cualquier modalidad de juego con la diferencia de que si jugáis en tiempo real jugaréis todos al mismo tiempo yendo a vuestro rollo y que si jugáis por turnos cada jugador tendrá treinta segundos para hacer lo que quiera en su turno antes de pasarlo al siguiente jugador en sentido horario. Sea como sea las acciones son las mismas en los dos casos y no varían en absoluto. Así que, ¿qué podéis hacer en el juego?



--> Colocar una loseta en el mundo

      Coged una de las losetas que tenéis y ponedla dentro del marco de juego. Deben tocar siempre dos líneas rectas, ya sean del propio marco o bien de otras losetas. Además, las losetas deben formar una imagen coherente, como si de un puzle se tratara. 



--> Esta loseta está tocando dos líneas rectas, que son del propio marco de juego. Esto es legal. En las esquinas no importa la loseta que pongáis, ya que es el comienzo del mundo, así que no es necesario respetar la coherencia del puzle. 





--> La loseta marcada con el círculo rojo está colocada de forma legal, ya que toca dos líneas rectas y la imagen que forma con respecto a la otra es coherente. 





--> La loseta aquí marcada con el círculo amarillo no está bien colocada ya que no toca dos líneas rectas.






--> Este es un claro ejemplo de buena colocación de las losetas. Observad que todas tocan dos líneas rectas y forman una imagen coherente. 










--> Descartar una loseta 

      Podéis descartar una loseta que tengáis en una de vuestras manos y colocarla en un espacio de descarte que aún dispongáis. Podéis dejar a la vista la cara que queráis de la loseta recién descartada. Recordad que la cantidad de espacios para descartar losetas depende del número de jugadores que seáis en la partida. 






--> Robar una loseta de terreno 

       Si tenéis vuestro espacio de descarte lleno no podréis realizar esta acción, además, debéis tener las dos manos libres para poder llevarla a cabo.

       Cumplidas las dos condiciones anteriores, podéis robar una o dos losetas de la bolsa de tela. Si robáis dos recordad que es una para cada mano. 




--> Cambiar de cara una loseta

      Si tenéis una mano libre podéis darle la vuelta a una loseta que esté en cualquier espacio de descarte para ver su otra cara.



--> Coger una loseta de un espacio de descarte

      Teniendo una mano libre tenéis la ocasión de hacer acopio de una loseta que esté en un espacio de descarte de cualquier jugador, incluyéndoos a vosotros mismos. Esta loseta debéis colocarla en el mundo inmediatamente, y en caso de no poder la descartaréis poniéndola en un espacio de descarte vuestro.



--> Seleccionar un dios

     Esta acción estará disponible si jugáis con el modo "Dioses visibles". La cosa trata de elegir uno de los dioses que queden con su reserva de profetas correspondiente. 
     






--> Colocar un profeta

      Esta acción estará disponible desde el momento en el que hayáis escogido a un dios. Si jugáis con el modo "Dioses secretos" podréis hacerla desde el comienzo de la partida. 

     Tras colocar una loseta en el mundo tenéis la posibilidad de poner un profeta en uno de los tipos de territorio que esta tenga: montaña, llanura, mar o bosque. 



--> En este ejemplo un jugador coloca la loseta que podéis ver bordeada con el círculo amarillo. 






--> Puede colocar un profeta en el trozo de mar o en el de bosque. 







         Un reino es un terreno más o menos grande del mismo tipo de territorio formado mínimo por dos losetas. Aprovecho la imagen anterior para retocarla y mostraros cuántos reinos hay:


1- Reino de bosque formado por dos losetas.
2- Reino de mar formado por tres losetas. 
3- Reino de bosque formado por tres losetas. 
4- Reino de llanura formado cuatro losetas. 

          Si os fijáis hay una llanura en la esquina superior derecha que no forma reino debido a que está compuesta por una sola loseta, al igual que el pequeño bosque de la parte inferior, el que está adyacente al reino de llanura formada por cuatro losetas. 

         Cuando ponéis un profeta en la loseta que acabáis de colocar en el mundo tenéis que tener en cuenta que controla todo el reino, no sólo la loseta en la que está situado. Así, por ejemplo, en esta imagen podéis ver que el profeta redondeado con el círculo amarillo, situado en el bosque, controlaría también la loseta de la derecha, ya que ambas pertenecen al mismo reino de bosque. Si dicho profeta se hubiera colocado en el lago en lugar de en el bosque controlaría todo el lago, no solo la pieza en la que estuviese situado. Así que, en definitiva, un profeta domina todo el reino en el que está situado. 



        

        Explicado lo de antes debéis saber que en un mismo reino puede haber más de un profeta, ya sean vuestros propios o de otros jugadores. Esto quiere decir que si un rival coloca una loseta adyacente a un reino en el que tenéis uno o varios profetas propios puede perfectamente acoplarse con vosotros poniendo un profeta suyo. En la imagen siguiente imaginad que el jugador que controla al dios de las llanuras (amarillo) coloca la loseta redondeada con el círculo amarillo. Como podéis ver, la sitúa adyacente a la que tiene un profeta verde, haciendo el reino de bosque más grande, y coloca un profeta propio en dicha región, haciéndole la competencia al otro. 





     Y  para terminar esta acción tenéis que tener en cuenta que si os quedáis sin profetas en vuestra reserva cuando coloquéis una loseta tenéis la opción de mover uno de los que tengáis ya puestos en el mundo a la nueva loseta recién colocada. 




--> Construir una Ciudad Legendaria

      Esta acción podéis llevarla a cabo desde el principio de la partida si jugáis con la modalidad "Dioses secretos" o desde el momento en el que escojáis un dios jugando en el modo "Dioses visibles". 

     Al igual que las losetas, una Ciudad Legendaria debéis situarla adyacente a dos líneas rectas. Una vez puesta en el mundo debéis colocar sobre ella un profeta, ya sea de vuestra reserva o bien, si la tenéis vacía, arrastrándolo desde una loseta puesta en juego en la que tengáis uno.



        
      Como las Ciudades Legendarias son fichas redondas debéis de saber que no tienen, lógicamente, los lados rectos, por lo que dificultan, e incluso impiden, el poder colocar otras losetas justo al lado de ellas. De esta manera se fastidia al resto de jugadores evitando que se expandan colocando nuevas piezas en el mundo.




--> Destruir una Ciudad Legendaria

               Esta acción la tendréis disponible si ya habéis escogido a un dios en caso de que juguéis con el  modo “Dioses visibles”. Si jugáis con el modo “Dioses secretos” podéis llevarla a cabo desde buen comienzo de la partida, siempre y cuando haya una Ciudad Legendaria disponible para destruir.

          Petar una Ciudad Legendaria es muy fácil, no hay más que sustituirla en el mundo por una loseta que encaje donde está situada. Fijaros en el ejemplo siguiente: podéis apreciar una Ciudad Legendaria (círculo amarillo) del jugador verde situada correctamente al lado de dos bordes rectos.






        Pues al jugador amarillo se le antoja la idea de destruírsela,  poniendo una loseta (círculo amarillo) que encaja perfectamente en esa posición.






         Cuando destruís una Ciudad Legendaria os quedáis con la ficha, volteándola, mostrando así su lado de “destruida”. El profeta que había sobre ella (en el ejemplo anterior, el verde) es eliminado para el resto de la partida, no es posible reutilizarlo de nuevo. El jugador (en el ejemplo el amarillo) que destruyó la ciudad colocando la loseta que encajaba en su posición tiene derecho a poner o mover desde otra loseta (según convenga) uno de sus profetas en uno de los tipos de terreno que esta tenga. 




* Fin de la partida

Una partida a 4 Gods termina:


- Si el mundo está lleno de losetas y, por lo tanto, no es posible colocar más.
- En el supuesto caso en el que no podáis colocar ninguna pieza más en el mundo porque no halláis la adecuada y, así, renunciáis a continuar la partida por mutuo acuerdo. También podría considerarse abandonar la partida por "rayada pura y dura" (ha pasado alguna vez).
- En el momento en el que la bolsa de losetas quede vacía.

     Tras cumplir la primera o tercera de las condiciones anteriores dispondréis de 30 segundos por jugador para hacer vuestras últimas jugadas antes de que la partida finalice del todo. 




* Y el ganador es...

En "4 Gods" se obtienen puntos de cuatro formas diferentes:


1- Puntos por Ciudades Legendarias.

     Las Ciudades Legendarias que todavía controléis en el mundo os aportan cinco puntos cada una, las que hayáis destruido a otros jugadores también os dan cinco puntos cada una. 

     En esta imagen de ejemplo podéis ver que el jugador que controla al dios de las montañas (círculo amarillo) tiene una Ciudad Legendaria bajo su control, mientras que el jugador que controla al dios de las llanuras (círculo rojo) domina, también, una solo. Ambos jugadores obtendrían cinco puntos. 




   
    En esta otra captura podéis ver las Ciudades Legendarias que los jugadores han destruido a los demás. El jugador que controla al dios... 

... de los mares no puntuaría nada porque no ha destruido ninguna.
... de las montañas obtendría 10 puntos por haber petado dos ciudades.
... de las llanuras y el de los bosques conseguirían cinco puntos cada uno por haber desintegrado una ciudad.






2- Puntos por profetas.

      Ahora fijad el ojo en aquellos reinos que contengan profetas. Para calcular los puntos que otorga un reino debéis contar la cantidad de losetas que lo componen y saber el total de profetas que hay en él. Una vez tengáis ambos totales restáis al número de losetas el número de profetas. El resultado final es la cantidad de puntos que se llevará el jugador que haya colocado más profetas en el reino. En caso de empate los empatados puntuarán igual. 




Llegados a este punto no tiene que haber ya ningún profeta en juego. 




3- El reino más grande

      Cada uno de vosotros habrá escogido un dios durante el transcurso de la partida (en el modo "Dioses visibles") o habrá empezado con uno desde el comienzo (en el modo "Dioses secretos"). Sea como fuere, cada dios representa un tipo de territorio. Tenéis que buscar en el mundo el reino más grande que haya de vuestro dios. Por ejemplo, el jugador que controle a la diosa de los bosques tendrá que buscar el reino de bosques más grande, quien controle al dios de las montañas tendrá que buscar el reino de montañas más grande...


     Una vez todos hayáis encontrado el reino más grande correspondiente a vuestro dios debéis compararlo con los del resto de rivales.

--> Aquel que tenga el reino correspondiente a su dios más grande obtendrá 15 puntos. 
--> El segundo en poseer el reino más grande correspondiente a su dios recibirá 10 puntos. 
--> El tercero conseguirá 5 puntos.
--> El cuarto no recibe nada. 


Los empates funcionan de la siguiente manera:

--> Si dos jugadores empatan por el primer puesto ambos comparten los puntos del primer y segundo puesto redondeando hacia abajo: 15+10= 25/2= 12 puntos para cada jugador.

--> Si dos jugadores empatan por el segundo puesto ambos comparten los puntos del segundo y tercer puesto redondeando hacia abajo: 10+5=  15/2 = 7 puntos para cada jugador.

--> Si dos jugadores empatan por el tercer puesto ambos comparten los puntos del tercer puesto redondeando hacia abajo, ya que la cuarta posición no aporta nada de nada: 5/2 = 2 puntos para cada jugador. 

--> Si empatan tres jugadores en la primera posición cada jugador recibe 5 puntos. 






4- Cantidad de reinos. 

     Cada uno de vosotros cuenta la cantidad de reinos correspondientes a su dios que haya en el mundo: quien controle al dios de las montañas determinará la cantidad de reinos de montaña que hay en el mundo, quien controle al dios de las llanuras hará lo mismo pero con los reinos de llanuras... 


      A raíz de aquí se determinará quién tiene la mayor cantidad de reinos correspondientes a su dios, después se debe de saber quién es el segundo en tener más... y así sucesivamente. La puntuación funciona exactamente igual que en el supuesto anterior, incluyendo los empates.







* Conclusión.

           Jugar en tiempo real. Este fue el motivo que me llevó a apostar por "4 Gods" cuando lo adquirí como regalo del pasado cumpleaños. Procuro que en mi ludoteca haya siempre hueco para mínimo un juego que sea distinto a los otros, si bien muchos de vosotros al ver losetas o al haberlo jugado ya saltaréis con el clásico "es como un Carcassonne". Sí, siendo realistas tiene una semejanza brutal, ya que se trata precisamente de eso, colocar losetas y meeples, que en este caso vienen representados por profetas. Tras haberlo jugado unas cinco o seis partidas y testeado los diferentes modos de juego no me desprendería de él. 

     Lo primero que destaco es el diseño. Me encanta ese aire "oscuro" que tiene, "cósmico" por decirlo de una manera. Son 40 euros de juego que os puede llevar a pensar que es caro, y es que en cierta manera lo es para el contenido que tiene. Pero qué queréis que os diga, hay que valorar la calidad: 

- La caja del juego es dura, no es de esas blandas que se rompen enseguida, aunque sí hay bastante aire dentro, todo hay que decirlo.

- Las losetas son del grosor clásico, como las del "Carcassonne" y el "Cacao", más que aceptable, y guapas-guapas a la vista. Cuando la partida termina es bastante agradable ver cómo ha quedado el mundo que habéis montado jugando.

- Los profetas son bastante diminutos, llevando a la alta posibilidad de que se puedan mover de un tipo de terreno a otro dentro de una misma loseta, o que puedan desplazarse de una a otra, todo esto sin daros cuenta y mientras jugáis. No obstante, imagino que los hicieron pequeños precisamente para que pudieran colocarse en todos los terrenos de todas las losetas. Si la posición de los muñecos varía ya os podéis imaginar cómo puede afectar a la puntuación final...

- Mención especial a las pequeñas cajas de cartón que sirven para guardar los profetas de cada dios  por separado.

   
        La particularidad que caracteriza a "4 Gods" es su modo de juego en tiempo real. Es cierto que la primera vez que jugué me resultaba extraña su mecánica, pero como suelo hacer procuro no decidir si un juego me gusta o no con tan solo una partida a sus espaldas. A este tras jugarlo unas pocas me ha acabado gustando. ¿Por qué? En primer lugar porque me parece curioso, todo sea dicho. Luego, no es complicado de jugar y las partidas no se alargan una vez se domina; de hecho, mientras más jugadores seáis más corta será la partida, debido a que como se juega en tiempo real sois más cabezas buscando las losetas adecuadas al mismo tiempo y encajándolas en el mundo. En tercer lugar, no hay que esperar a que os llegue el turno, es imposible permitirse un sólo despiste. Por supuesto que jugáis a vuestro rollo, pero esto no implica que no tengáis que estar atentos a lo que hacen los demás. Por poneros un ejemplo, cuando yo juego estoy completamente concentrado en lo que yo hago, pero también me fijo un poco en el resto, observando dónde colocan sus profetas por si me quitan reinos o bien para arrebatárselos yo a ellos. Y es que es en este punto donde radica parte de la gracia de este juego: hay que ir colocando losetas e ir invadiendo reinos, pero también hay que ir viendo un poco las jugadas de los demás. 

      También probé el modo de juego "Por turnos". No os lo recomiendo a menos que jugar en tiempo real os parezca una bazofia enorme. Jugar por turnos para mi gusto es más estresante, ya que dependéis de hacer todo lo que podáis a saco en 30 segundos. Sí, es cierto que fuera de vuestro turno podéis observar y analizar el tablero hasta que os vuelva a tocar, pero a mí poca gracia me haría hacer un puzle de 500 piezas si me dan 10 minutos para hacerlo. Puede ser que la primera jugada la tengáis pensada pero, ¿y la siguiente qué? Con un reloj corriendo y amenazándoos con el fin del turno... Al menos en el modo "Tiempo real" tenéis la posibilidad, según como seáis, de jugar yendo a vuestro ritmo y a vuestra bola, sin desesperarse.
   
    Analicé el modo de juego de "Dioses secretos" y "Dioses visibles". Personalmente jugar con los dioses ocultos no veo que aporte emoción alguna, y el motivo es que ya es complicado de jugar estando pendiente de lo tuyo y de lo que hagan el resto con sus profetas, por lo que poco os fijaréis en qué dios ha cogido Paco y cual Marta. Elegir un dios u otro solamente ayuda a conseguir puntos en los apartados mencionados antes "El reino más grande" y "Cantidad de reinos", que pueden ayudaros a ganar, claramente. La cosa es que al principio de la partida es muy fácil colocar losetas en el mundo, pero a medida que el espacio se va reduciendo la dificultad por encontrar las adecuadas para rellenarlo aumenta drásticamente, y si a esto le sumáis el tener que estar pendiente de no beneficiar a los demás añadiéndoles piezas pertenecientes a su dios secreto... complicado lo veo. Prefiero jugar con los dioses visibles y así, si quiero joder al resto, lo podré hacer siempre que quiera y que me venga en gana.

    Y a medida que avanza la partida se hace más y más complicado colocar losetas en el mundo, como ya he dicho antes, por lo que a más de uno le frustrará sin lugar a dudas. No deja de ser un puzle, que cuando lo estáis haciendo y lleváis rato sin dar con la pieza que os falta para continuarlo os acaban dando ganas de dejarlo. Lo bueno es que "4 Gods" dispone de la posibilidad de robar al resto de jugadores las losetas que tengan en sus descartes, dando un poco de flexibilidad, aunque realmente no ayuda demasiado. De las formas que tiene una partida de acabarse, explicadas más arriba, la que más me suele suceder a mí en mis partidas es la de que la bolsa se quede sin losetas, es muy complicado que una partida se termine debido a que se complete el mundo.

   Y para terminar hablaré un poco de las "Ciudades Legendarias". Es la única parte de estrategia que le veo al juego. Lo suyo es colocarlas allí donde vuestros rivales estén ampliando sus reinos por tal de bloquearles su avance. Claro está que esto provoca, a su vez, que el juego tenga más posibilidades de bloquearse y de no poder terminar la partida por completar el mundo.

  Concluyendo, no estáis ante un juego de estrategia, no os tendréis que quemar la olla planificando acciones ni nada por el estilo. Es un juego que tenéis que tomarlo por lo que es: un puzle en toda regla, el cual formáis jugando todos a la vez. No es para jugones que buscan algo denso, duro, ni siquiera le llega en dificultad a otros juegos de losetas que bien conocéis ya. Pese a lo mal que hablan por la red y lo poco valorado que ha sido, a mí me ha gustado y me quedaré con él. No es por llevar la contraria a aquellos que dicen que no les gusta, es que realmente me ha gustado, que para gustos los colores.



¡ Cread vuestro mundo con "4 Gods"!




No hay comentarios:

Publicar un comentario